Eliminados otra vez

El Rojo tuvo un partido para el olvido, tenía que ganar, pero perdió 2 a 0 y quedó eliminado de la Copa Sudamericana en fase de grupos. 

Independiente empezó dominando el partido, mostró la intención de dominar el encuentro. Llegaba primero con  un remate de Soñora que quedaba en manos del arquero brasileño, Roa por izquierda buscó juntarse con Soñora y Blanco. Si bien por momentos el mediocampo del Rojo encontraba esa asociación, no podía llegar con peligro. Pasados los 15' minutos, el juego y la intensidad empezó a mermar.

Por derecha Batallini y Vigo, muy imprecisos dejaban rengo el juego del equipo de Domínguez. La imprecisión se hizo presente y eso hizo crecer al conjunto carioca, que además buscaba permanentemente frenar el ritmo de partido, con faltas o jugadores que se quedaban tirados. El juez del partido permitió de más y el encuentro empezó a desmadrarse. Cerca del final una falta a favor de Ceará terminó en el gol de Mendoza y se caía todo lo que Independiente había aspirado, pero que claramente no había cumplido.

En el segundo tiempo Domínguez apostó por los ingresos de Fernández y Pozzo, si bien ambos en los primeros minutos generaron alguna aproximación, el equipo no encontraba claridad. Vigo en su peor partido desde que llegó al club, solo daba ventajas por la derecha. Con la necesidad imperiosa de buscar el gol, el entrenador decidió que tanto el lateral derecho como Rodríguez, el izquierdo salgan para el ingreso de Márquez y Togni. 

Ya sin esquema fijo, el equipo fue al como sea. Menos fútbol se vio, un equipo que ya derrotado recibió el segundo tanto que puso punto final a su participación en el certamen internacional. El equipo fue despedido en una lluvia de insultos dirigidos a la actual dirigencia del club.