Una victoria muy sufrida


Independiente le ganó 1-0 a Atlético de Tucumán por la fecha número siete de la Superliga. El gol del encuentro lo metió Nicolás Figal.

En el primer tiempo, el "Rojo" mostró una actuación muy pálida. Al comienzo del encuentro hubo muchos errores por partes de ambos equipos en defensa, lo que significó que los dos tuvieran llegadas. Los de Avellaneda no supieron capitalizar las ocasiones con las que contaron.

Ya para los 15´ el juego colectivo no era parte del ataque de Independiente, que abusaba de los pelotazos. El mediocampo compuesto por Benavídez y Romero, estuvo firme en la recuperación pero no pudo generar juego para sus compañeros.

El primer tiempo terminó casi sin situaciones claras de gol. Estuvo en todo momento trabado y prevalecieron las faltas por sobre el fútbol.

La segunda mitad del partido continuó en la misma sintonia que la primera. En un partido peleado en el cual parecía difícil romper la paridad, apareció Figal, a los 17 minutos, con una jugada magnífica. El defensor se animó a encarar en una corrida desde atrás de mitad de cancha, jugó una pared con Silvio Romero, en la puerta del área, y terminó con un pase al medio para la recepción de Palacios que solo tuvo que empujar la pelota hacía un arco sin arquero.

Los tucumanos reaccionaron con un saque de esquina, que agarró una comba envenenada que sacó Campaña. Sin muchos recursos, los centros fueron los puntos fuertes del local.

A los 23´ salió reemplazado Silvio Romero y entró Barboza, para que empezar a enfriar el partido. Independiente priorizó la defensa para intentar no sufrir lo que quedaba. Desde ahí hasta el final fue casi todo del "Decano", excepto un penal no cobrado sobre el final que le cometieron a Blanco.

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