El Rojo “Recopado” en Japón



1995 – Independiente se encuentra en Japón buscando ganar la única copa internacional oficial que le faltaba a sus repletas vitrinas, me refiero a la Recopa Sudamericana, competencia que había empezado a disputarse en 1989, enfrentando al campeón de la Copa Libertadores contra el campeón de la Supercopa Sudamericana. Éste último trofeo dejó de disputarse en 1997, y desde el 2003 la plaza la comenzó a otorgar la Copa Sudamericana, fundada en 2002.
En 1995 la disputa fue entre Vélez, campeón de Copa Libertadores en 1994 e Independiente con su coronación en la Supercopa de 1994. Fue un único partido en el Estadio Olímpico de Tokio, Japón, sitio donde el Rojo se había coronado campeón mundial frente al Liverpool, y donde Vélez había hecho lo propio en diciembre de 1994 frente al Milan.

Aquel día el Rojo salió al campo con: Luis Islas; Juan Carlos Ramírez, Claudio Arzeno, José Tiburcio Serrizuela y Guillermo Ríos en defensa; al medio Diego Cagna, Raúl Cascini, Jorge Burruchaga (46 Pablo Rotchen) y Daniel Garnero (62 Gustavo López); y adelante Sebastián Rambert y Albeiro Usuriaga (77 Tony Gómez), dirigidos por Miguel Ángel Brindisi. Mientras que Vélez lo hizo con: Chilavert; Zandoná, Sotomayor, Trotta y Cardozo (73 Pompei); Herrera, Basualdo, Husaín (85 Pellegrino) y Bassedas (73 Sánchez); Asad y Flores, dirigidos por Carlos Bianchi.

La primera chance del partido fue para Vélez por parte de Trotta, fue clarísima pero se fue alta. Luego el trámite del partido fue muy parejo, sin merecimientos para ninguno pero Vélez era levemente superior. Hasta que promediando el segundo tiempo, José Tiburcio “Tiburón” Serrizuela sacó un potente tiro libre de muy larga distancia, que Chilavert despejó al córner, y de ese córner llegaría el gol rojo. Centro corto que despeja la defensa de Vélez, la pelota le queda al “Luli” Ríos que la vuelve a meter al área, fue pasada para que Arzeno la baje, la tire fuerte al área chica, y es allí donde aparece Serrizuela para mandarla a la red. Iban 69 minutos de juego, y en los 20 restantes el Fortín empujó pero sin claridad hasta terminar el encuentro, para que Independiente se consagre campeón.

Independiente lograba el único título internacional que le faltaba ganar, como dije al principio, y lo hacía en la séptima edición desde la fundación de la competencia. Ya había logrado la Libertadores en la quinta edición, la Interamericana en la tercera, la Intercontinental en la decimocuarta edición, y la Supercopa en la séptima. En el futuro, al crearse la Copa Sudamericana, el Rojo la lograría conquistar en la novena edición. En consecuencia, cada copa internacional para equipos sudamericanos con tradición histórica, Independiente la puedo llevar a sus vitrinas a menos de 15 años de la creación de cada una. Y aclaro lo de tradición histórica porque no estoy incluyendo copas como la Master (tuvo dos ediciones), Nicolás Leoz (tuvo tres ediciones) o Mercosur (tuvo cuatro ediciones).

Por otra parte, el Rey de Copas se mantenía en el reinado de cantidad de títulos internacionales a nivel mundial, liderazgo que sostenía por tercera década consecutiva. Recordemos que Independiente se convierte en el club con más títulos internacionales en 1974 superando al Real Madrid, se mantuvo solito en la cima hasta 1994 cuando el Milan de Italia lo empata, pero ahora en 1995 una vez más supera a todos, y lo ampliaría una vez lograda la Supercopa de ese mismo año.

Finalmente hay que decir que con el título logrado en Japón frente a Vélez, culminaba el proceso de Miguel Brindisi al frente del equipo, porque dejaría el club asumiendo de forma interina Ricado “Chivo” Pavoni, y luego Miguel Ángel “Zurdo” López. Brindisi cruzaba la vereda para dirigir Racing, mientras que Independiente con López, a pesar de tener bastante rechazo por el hincha, seguiría escribiendo historia grande a finales de ese año 1995, al convertirse en el primer equipo extranjero en coronarse campeón en el mítico Estadio Maracaná.

Les dejo el video resumen del partido:


Escrito por Hernán Gustavo Paglieri – Vicepresidente Peña Roja Daniel Bertoni – San Andrés de Giles

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