Suspensión y pase de ronda

 

A falta de 10 minutos para finalizar, el arbitró decidió suspender el encuentro entre Santos e Independiente debido a incidentes por parte de la hinchada local. Con bronca debido al falló que dió a conocer esta tarde la Conmebol, los brasileros se hicieron escuchar mediante bombas de estruendo. El rojo avanzó sin hacer un gol en ambos partidos.

Cuando parecía que todo terminaba de buena manera, apareció la violencia. Una verdadera lástima ya que el encuentro había sido de ida y vuelta y con una intensidad propia de un partido de Libertadores. La Policía debió intervenir en la "torcida" local y también en el campo de juego.

Independiente iba a disputar un tiro libre aledaño al arco contrario y fue allí cuando se percibió la primera bomba en el estadio y el partido quedó demorado. Luego el árbitro tuvo que suspenderlo definitivamente al ver que la violencia no cesaba y los infantes no daban abasto.

¿Era de esperar?¿Se podría haber prevenido? Lo cierto es que el rojo avanzó a la siguiente ronda de la copa por la mala inclusión de Carlos Sánchez en Avellaneda.